Es Passets

Durante los primeros minutos, el camino es fácil de seguir, la pista es ancha y de buena pisada, pero una vez nos vamos adentrando dentro del denso bosque, es complicado seguir la ruta correcta, el GPS se hace muy necesario.

Estamos en una zona de gran actividad carbonera, muestra de ello es la gran cantidad de barracas, hornos, rotlos de sitja por toda la zona. Nos vamos acercando a las paredes de la vertiente norte de la Mola de Son Ferrandell y llegamos a un precioso paso que nos dará acceso al GR221, se trata de Es Passets, un paso escalonado que supera las paredes de la montaña, que por cierto son de un color blanco muy llamativo como se ve en las fotografías.

Font de s’Almangra

El paso es fácil y muy divertido, asciende rápidamente y nos da acceso a una pared seca que tenemos que superar. Estamos ya en el GR221 de Esporlas a Valldemossa, lo abandonamos enseguida por un sendero hacia el Oeste en dirección hacia la cima de la Mola de Son Ferrandell.

Iremos por restos de caminos de carboners y cerca de los acantilados. Siguiendo las fitas, localizamos la font de s’Almangra, una fuente que nace dentro de una cueva natural en donde predominan las rocas de Almangra, topónimo que da nombre a la fuente.

La Almangra está compuesta de peróxido de hierro aluminoso, mezcla natural de alúmina y tierra con óxido rojo de hierro, este material se empleaba a modo de pintura para marcar a las ovejas y para otros trabajos en donde fuera necesario.

Mola de Son Ferrandell y Penyal Vermell

Continuamos por restos de camí de carro y de construcciones de actividad carbonera y nos vamos acercando al espolón de la Mola de Son Ferrandell por la vertiente de la finca de Son Ferrandell. Salimos del bosque y pasamos a un terreno con mucha piedra y fuera de camino, hay bastantes fitas. Llegamos al extremo y cima de la Mola de Son Ferrandell (726 m), las vistas son espectaculares, mires por donde mires.

Esta montaña es muy peculiar y diferente, ya que está en un lugar aislado y vertiginoso, me encanta. Regresamos atrás por la vertiente de Son Cabaspre, fuera de camino y con abundantes fitas. Llegamos a la cima del Penyal Vermell (665 m), una cima que no está muy definida.

Coll de sa Basseta

El terreno es muy pedregoso y no fácil de seguir, la fitas ayudan mucho. Por fin llegamos al GR221 y cogemos la dirección hacia Esporles, cruzamos la pared seca que divide los municipios de Valldemossa y Esporles. 

En el Coll de sa Basseta, la ruta cambia de dirección y gira hacia el noroeste. La última parte de la ruta, transcurre por la antigua carretera de Esporles a Valldemossa, en ligera ascensión regresamos a Valldemossa, volviendo a la pared seca que hemos alcanzado al principio y por último finalizamos la excursión en George Sand, haciendo los últimos 700 metros por la carretera de Valldemossa a Banyalbufar.

En definitiva, una ruta espectacular y complicada, no apta para principiantes, hay una gran parte de la ruta que es fuera de camino y no es fácil orientarse dentro del bosque. Además es una ruta muy exigente físicamente, hay que tener una buena preparación física.